Tal vez pueda empatizar con usted:
ha perdido la hacienda de sus padres
en una infame querella judicial
impuesta
por quien dice ser su hermano,
se ha quedado literalmente en la calle
se ha quedado varado en la vía
virando un “mañana mejor”.
El día le sabe a maraña
(a mí, también)
ya no veremos los vientos acariciar los higos
a los conejos ocultarse entre la mata
mucho menos a las mujeres bailar
mientras cosechan pecanas.
El día me sabe a mañana;
sin embargo son las 4: 30 p.m.
Los braceros en un acto de solidaridad
han condonado sus penas
y hoy tendrá cobijo en 24 hogares jornaleros.
A propósito del ganado:
como símbolo de fidelidad muchos conejos
han aguardado sus cópulas y cortejos
hasta encontrar un nuevo hogar;
acá en la vía de evitamiento hay mucha bulla,
pero te exhorto: esfuérzate, oye al carnero que te aclama.
Y volviendo a los conejos hay más de uno que chirría débilmente los dientes,
no es de aflicción: están evocando las caricias tuyas:
estanciero ecuánime y quizás maravillado.
Maravillémonos ambos las pecanas cultivadas tienen una excelente cotización en el mercado.
Tal vez pueda empatizar con usted
yo, el más fiel de sus braceros